Hoy, 15 de agosto, hace exactamente un año un grupo de vecinos nos juntábamos en la Escuela 6 con la idea de conseguir UN ESPACIO FÍSICO, TECHADO, CÓMODO, DIGNO para albergar en él un proyecto cultural que respondiera a nuestras necesidades y mostrara los rasgos espirituales, intelectuales y afectivos que nos distinguen y comprendiera los estilos de creación, las diversas formas de expresión artística, las tradiciones y las creencias que caracterizan a nuestra comunidad.
Las reuniones semanales contaron, por ser el 2013 un año electoral, con la presencia de concejales en ejercicio y diversos candidatos a ocupar una banca. También escuchamos interesantes ofrecimientos de espacios físicos y de trabajo cultural conjunto con otras instituciones.
Salimos a la calle a pedir la opinión de los vecinos, reunimos las planillas firmadas, las remitimos al Ejecutivo Municipal y al HCD. Para poner en marcha el proyecto pedíamos “que se gestionen fondos y se destine un presupuesto para la cultura en Sierra de la Ventana que contemple el alquiler de una casa adecuada, el pago de los servicios esenciales: agua, luz, gas, teléfono, Internet y el mantenimiento general edilicio y se destine un personal de planta, contratado o de planes sociales, para las tareas de portería y limpieza”.
Nada descabellado ni arbitrario ni caprichoso pues esta carencia es histórica.. Una Casa de la Cultura tendría el valor simbólico de la aglutinación de todas las expresiones culturales del pueblo y el valor de la factibilidad porque en una casa se podría, mediante la ejecución de diversas actividades socio-culturales y artísticas, recuperar la historia, fortalecer los lazos de la identidad y posicionar al pueblo como destino de turismo con un rico corredor cultural.
Y es evidente la necesidad de UN ESPACIO FÍSICO, TECHADO, CÓMODO, DIGNO DONDE HACER CULTURA para que los talentos locales puedan expresarse, para perfeccionar las prácticas artísticas, para encontrarnos, desarrollarnos y reafirmar nuestro sentido de pertenencia. La cultura, al revés de lo que muchos piensan, no es una sumatoria de eventos para entretener sino el compendio de saberes que determinan los modos de vida y costumbres de una sociedad. El modo en que asumimos lo cotidiano y lo extraordinario es lo que, realmente, nos identifica.
El Concejo Deliberante trató nuestra solicitud en la sesión del 3 de septiembre, el 1º de noviembre nos entrevistamos con el Intendente quien, el 1º de abril de 2014, en la apertura de las sesiones ordinarias del HCD expresó: “Otro planteo que surgió de la propia comunidad de Sierra de la Ventana tiene que ver con la posibilidad de la creación de una casa de la cultura, un lugar donde los chicos puedan acercarse, donde puedan tener acceso a Internet, acceso a distinta bibliografía y también a actividades culturales que vayan surgiendo de la inquietud de la propia comunidad, va a tener su espacio en un lugar recuperado como fue el predio del ONABE, donde vamos a comenzar a trabajar en base a un proyecto que ya obra en la Secretaría de Obras y Servicios Públicos, que en el transcurso de los próximos meses se va a estar haciendo realidad también, lo cual va a ser un aporte para la educación y la cultura de esa localidad muy importante, y yo se que se esperaba mucho por la comunidad”.
Ojalá así sea, pues los habitantes en general y los artistas en particular, tenemos derecho a desarrollar nuestras inquietudes sociales, educativas, culturales en el lugar que elegimos para vivir, para imaginar, para producir ideas, para promover valores y prácticas que contribuyan a revertir situaciones de exclusión y a fortalecer el capital cultural de nuestra comunidad.
NORMA FERNANDEZ