Guadalupe Salinas(32) y Débora Otero(38) realizaban el domingo después del mediodía un ascenso al cerro más alto de la Provincia de Buenos Aires, el Tres Picos(1243 Mts. Sobre el nivel del mar).
Las chicas que provienen de Moreno y Hurlingham se separaron cuando caía la tarde porque una de ellas no podía cruzar un arroyo y la otra decidió ir por otro lado y esperar a su compañera pero hubo una confusión y ambas se esperaron en puntos distintos para ir al encuentro de la otra.
Otero decidió porque caía la tarde tomar el camino por el que había ascendido para llegar al pie del cerro y Salinas opto por quedarse a esperarla pero esto no ocurrió, extraviándose en el lugar.
Al conocerse la noticia se montó primero un operativo que demandó el trabajo de personal de la Estancia Funke, Bomberos de Tornquist, Sierra y Villa Ventana, sumándose luego la armada Argentina con un helicóptero, defensa Civil, Un perro especializado en esta búsqueda e integrantes de la policía como así también personal que viajo desde La Plata.
Durante esta mañana la situación se complicó ya que la neblina no dejaba divisar el cerro aunque de a poco se fue disipando y apareció el sol.
Cerca del mediodía de este martes cuando estaba nuevamente por llegar el helicóptero, perros de rescate y hasta se había pensado en drones, tres personas baqueanas del lugar encontraron a la mujer.
Tomás Meyer, su hijo Tobias y su novia Mariana Vanesa Enrri, esta última la divisió, se toparon con Guadalupe a mil metros de altura en el denominado paso dinamitado. La chica corrió hacia ellos y se fundió en un abrazo con el llanto incontenible por lo que había vivido.
Rodrigo Fhur de Defensa Civil informó sobre la aparición con vida de la mujer que descendió del lugar por sus propios medios en buen estado de salud.
El clima jugó un papel especial. A esta altura todos los años en el cerro Tres Picos puede haber temperaturas de diez grados bajo cero y más, pero la suerte de una semana cálida cooperó para que pudiera superar este trance.
Fue muy emotivo el encuentro con su amiga Débora sobre la que se tejieron muchas hipótesis y más aún cuando no se sabía nada sobre el paradero de su amiga.
Las chicas hace 8 años que se conocen y ellas dicen que son compañeras de la vida y aventureras.
Guadalupe se alimentó con azúcar orgánica, nueces y chocolates y tomaba agua de las vertientes y espejos que se han formado en el lugar. Para dormir elegía pequeñas cuevas y se abrigaba con naylon que tenía en su mochila.
Una curiosidad, ella llevaba esmalte de uñas en su mochila y se dedicaba de día a pintar piedras para dejar el rastro por si era buscada.
Al descender les gritó a sus rescatistas “Hace tres días que ando perdida”. Thomas uno de los que primero llegó a su encuentro le contestó “Nosotros hace tres días que te estamos buscando”.
Fue rara la sensación al llegar al escenario donde había por lo menos diez móviles policiales, bomberos , baqueanos, rescatistas que más allá del cansancio sentían una satisfacción enorme por el resultado que muchos creían podría haber sido el peor.
Una vez trasladada a un sector de la Estancia Funke donde se encontraba Mónica Silva de la fundación , se reencontró con sus hermanos que viajaron especialmente al lugar y también fue muy emotivo, solo atinó a decirles “Me van a matar no?” .
Quedará como anécdota para ella. Pero debemos destacar el inmenso esfuerzo de mucha gente que no durmió para dar con su paradero y el honor a nuestros bomberos que gentilmente nos trasladaron al lugar a Emiliano Bartolini, Mario Ferro y Maximiliano Martinez como así también a su Jefe Martín Hagg y al titular de defensa civil Rodrigo Fhur bajo la supervción del Intendente Municipal Gustavo Trankels que puso todos los medios a disposición.
En la foto donde hay dos hombre y una mujer pertenece a las personas que la encontraron
https://www.youtube.com/watch?v=AFPZuUnRZbw&feature=youtu.be