El Ejecutivo Municipal puanense que encabeza el Intendente Facundo Castelli, ha cometido un hecho de censura inadmiisible, puesto que en esa comuna se le ha prohibido a la periodista NANCY MARCHI, del SEMANARIO PERFILES de Puan “acercarse a ningún funcionario municipal”. Desde el área de prensa comunal, se le indicó a la trabajadora de prensa que el motivo de tamaña irracionalidad, se debe a que la gestión municipal puanense “no comparte la línea editorial de su periódico”. Esto es, que el Intendente y su gabinete no están de acuerdo con lo que ha opinado Marchi en la editorial de su periódico.
Se trata, de un acto que limita la libertad de prensa, que atenta contra el derecho a la información pública y es en suma UN INTOLERABLE ACTO DE CENSURA A LA PRENSA LIBRE. Desde aquí nos solidarizamos con la colega Nancy Marchi y los compañeros del semanario PERFILES DE PUAN, condenando lo actuado por las autoridades municipales puanenses, e instándolos a reflexionar y deponer su autoritaria actitud.
Reproducimos a continuación la editorial, en la Nancy Marchi cuenta lo sucedido:
El título de este editorial, “Qué tristeza”, se debe a que el día viernes llame al Municipio y hablé con el encargado de prensa, el periodista Carlos Morelli, como lo hago habitualmente para ver si algún área está haciendo algo interesante para poder trasmitírselos a ustedes, nuestros lectores. Morelli me dijo que lamentaba decirme que yo ya no podía hacer notas con ningún funcionario -o sea la historia se repite- porque el Ejecutivo Municipal estaba ofendido por mi línea editorial.
Yo pensé sinceramente que era una broma, no reaccioné en el momento, porque no saben qué difícil que es aceptar este tipo de cuestionamientos. Volví a llamar y le dije: “vos sos periodista, sabés que no se puede hacer una cosa así”; a lo que me contesto: “ellos -por los funcionarios de la administración comunaltienen derecho a sentirse molestos”.
Yo sabía que esto iba a pasar y lo supe desde las dos reuniones previas que tuvimos con el Intendente y la prensa. Allí, Castelli dijo que no le gustaban las críticas, que prefería las sugerencias, sin darse cuenta que para eso tiene un montón de funcionarios que ocupan el 80% de la gente que va a un acto oficial, ellos tiene que
darle las sugerencias, el periodismo es otra cosa muy diferente.
Además, yo hago las editoriales, pero no les cierro la puerta. Pueden venir , llamar y decirme lo que dijiste no es correcto, siempre y cuando yo haya mentido, porque si es mi opinión, la tienen que respetar. Me da tristeza que alguien que hace tres meses asumió como intendente, y dijo que era la nueva política, tenga espacio en la Municipalidad para ideas superadoras como sumarse al kirchnerismo después de compartir una gestión que los trató de indignos y al gobierno nacional sospechado de corrupción, no sea tan amplio en su ideas con respecto a la labor del periodismo.
Lamento que no conozca los derechos que tenemos los medios de comunicación; como por ejemplo el del libre acceso a la información pública, derecho que es al mismo tiempo de ustedes, nuestros lectores; así que sus abogados tendrán que agarrar los libros y ponerse a estudiar, porque yo no pienso quedarme “Una prensa libre puede ser buena o mala, pero sin libertad, la prensa nunca será otra cosa que mala” callada ante esta situación. Dificultar la tarea periodística, dando órdenes desde una administración municipal de que no se atienda expresamente a un medio de comunicación, es prácticamente lo mismo que cercenar el derecho a la libertad de prensa, consagrado en nuestra Constitución. Al mismo tiempo, no aceptar una línea editorial, ya que no se trata en este caso que el semanario haya publicado información falseada o mentiras, implica directamente en no creer, y bastardear, uno de los cimientos de la democracia: QUE TODOS LOS CIUDADANOS TENEMOS DERECHO A EXPRESAR NUESTRA OPINIÓN, SIN POR ELLO SER CENSURADOS NI
PERSEGUIDOS; y más cuando se trata de la crítica de actos de gobierno.
Que el mensajero de esta barbaridad sea un periodista, ya no merece comentarios. Los funcionarios están en todo su derecho de sentirse molestos por una opinión que no
los beneficia, pero es algo con lo que deben convivir, en Puan, en Buenos Aires, y en cualquier lugar del mundo donde se viva bajo un sistema democrático. Que quede claro, en este semanario no se opinó sobre cuestiones personales, ni particulares, ni que afecten el honor de las personas, ni su intimidad; sólo sobre actos de gobierno que son de dominio público.
El Municipio no es una empresa privada que elige con quién quiere hablar o no, es un organismo público, y el derecho a la información también es uno de los pilares de la democracia. Estar hablando de esto, a casi 30 años del regreso de la democracia a nuestro país, pareciera un chiste, y una falta de respeto a la memoria de todos aquellos que dejaron su vida en pos de estos valores, y de que hoy tengamos la posibilidad de vivir en libertad…
Siento tristeza que los Coordinadores de prensa desconozcan esto, o que hagan que no les importa. Y sobre todo, que esta administración tan pronto muestre la
debilidad que tiene ante la crítica y el poco poder de defenderse. Hace más de un mes que pedí una nota, pero no querido hablar el Intendente con este medio. “Perfiles” ya ha pasado por estos hechos. El Secretario Privado del Intendente Castelli ha pasado por varios puestos, pero se lo conoce más por haber sido quién, con la complicidad que les da el poder, empapeló el semanario y mi casa hace algunos años atrás.
Si esta es la nueva dirigencia política, que tiene costumbres arbitrarias propias de la dictadura, me da mucha vergüenza. Yo no puedo decir que recibí directamente
advertencias, pero sí se percibía cierta incomodidad, un día mientras le hacía un reportaje al intendente, éste mencionó que como a mí me felicitan por las editoriales,
a él le decían que me saque la publicidad oficial. Los periodistas somos como la piedra en el zapato de quienes están del lado del poder, yo no pienso cambiar mi
línea editorial para conformar los caprichos de nadie. Y creo que el distrito está en una situación muy mala, como para reunirse para definir qué se hace con un medio
que no les gusta.
A mis lectores gracias y nos reencontramos el martes”