El convenio establece pautas generales que deberán cumplir las comunas interesadas en desarrollar la industria de las energías limpias, sobre todo en materia de capacitación, cobro de tasas, exigencias de cuidado del medio ambiente, vinculación con las empresas y promoción del potencial de la región.
Referentes de ocho distritos de la región firmaron hoy en Médanos el Acuerdo para el Desarrollo de Energías Renovables en el Sur Bonaerense, un documento que determina los lineamientos generales a seguir por cada municipio para promover un crecimiento armónico de este tipo de proyectos en la zona.
De la rúbrica del convenio tomaron parte referentes de los distritos de Bahía Blanca, Tornquist, Villarino, Coronel Rosales, Monte Hermoso, Patagones, Saavedra y Coronel Dorrego, a los cuales en breve se sumarán Tres Arroyos, Necochea y Miramar.
Del encuentro tomaron parte las diputadas Rosío Antinori (Cambiemos) y María Florencia Bevilacqua (Frente Renovador). Esta última es hija del intendente anfitrión, Carlos Bevilacqua, y presidenta de la comisión de la Energía de la Cámara Baja bonaerense.
El acuerdo establece que cada comuna deberá diseñar un plan de desarrollo regional con eje en las energías renovables, cuya visión sea la conformación de un clúster energético en el sur bonaerense. El término clúster -“racimo”, en inglés- hace alusión en este caso a articulación y colaboración mutua entre municipios que tengan por objetivo desarrollar la industria de las energías limpias en esta zona del país.
El acuerdo firmado ayer también determina que cada comuna deberá “promover la gestión de capacitaciones en los oficios requeridos para la construcción y mantenimiento de obras de energía tales como parques eólicos, parques solares, biogás, co-generación y eficiencia enérgetica”.
Además, se acordó que cada municipio deberá homogeneizar los criterios contables sobre tributos, tasas, disposiciones y similares documentos que se apliquen a este tipo de inversiones.
Este es un aspecto central del acuerdo, ya que apunta a evitar que las inversiones que lleguen se vuelquen exclusivamente a los municipios que están en condiciones económicas de brindarles beneficios especiales, relegando o dejando de lado a otros que no puedan brindar exenciones o descuentos tributarios.
De la misma forma, las comunas tendrán que definir pautas comunes para la redacción de ordenanzas y decretos reglamentarios que fijen restricciones en materia de impacto ambiental, a fin de propiciar una adecuada protección de los recursos naturales y culturales de cada territorio.
También se acordó fortalecer vínculos estratégicos con el gobierno de la Provincia y la Nación para promocionar a la región como clúster energético. Esta acción también se extenderá a “diferentes actores y organizaciones intervinientes durante los procesos de construcción de obras y su operación (colegios de profesionales, pueblos originarios, asociaciones civiles, ONG y similares)”.
Por último, se conformará el Consejo Permanente de Energía, que tendrá como actividades iniciales “la confección de plan de mediano plazo 2018-2021; gestionar estudios de redes, transporte y distribución de la energía; interactuar con instituciones que promuevan el desarrollo de las energías; interactuar con organismos públicos de gestión; y conformar y unificar los programas de capacitación municipal”.