Buenos Aires, 13 marzo (NA) — El impacto de la crisis económica en la Argentina cada vez se siente más en los niños y adolescentes, lo que se viene reflejando en distintos informes que alertan sobre la creciente población juvenil que cae bajo la línea de pobreza.
Esta realidad no es ajena al ámbito educativo y así queda demostrado en el último informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA) de la Universidad Católica Argentina (UCA), que reveló que 6 de cada 10 niños y adolescentes escolarizados en el país son pobres, es decir el 62,9%.
La mayor proporción de este grupo la componen los alumnos de escuelas públicas, donde la pobreza alcanza a 7 de cada 10 (71,6%).
En tanto que en el caso de las escuelas privadas laicas, el porcentaje cae a 26,8%, mientras que la cifra asciende al 33,9% entre los alumnos de colegios parroquiales o religiosos. Al tener en cuenta ambos sectores de gestión privada, el análisis arroja que 3 de cada 10 alumnos de escuelas privadas (29,4%) se encuentran en situación de pobreza, lo que representa cerca de 356.000 niños y adolescentes.
El informe “Caracterización de la población de niños/as y adolescentes escolarizados según el tipo de gestión educativa” de la UCA, que abarca a niños y adolescentes entre 0 y 17 años que asisten a instituciones educativas, precisó también que el 16,2% de los alumnos argentinos se encuentran en situación de indigencia.
La mayoría de los niños y adolescentes escolarizados del país asisten a escuelas de gestión estatal (72,4%), según datos del último Relevamiento Anual elaborado por el entonces Ministerio de Educación de la Nación. De los tres niveles obligatorios (inicial, primario y secundario), el jardín de infantes es el que tiene los mayores porcentajes de matrícula en el sector de gestión privada.
El estudio que fue publicado este lunes y corresponde al segundo semestre de 2023, supone una leve mejora con respecto a las cifras de 2022.
El informe fue elaborado por los investigadores Ianina Tuñón y Matías Maljar, en base a los datos de la Encuesta de la Deuda Social Argentina (referidos únicamente a centros urbanos con más de 80 mil habitantes) para indagar en algunas características de la población en edad escolar, con el objetivo de ofrecer evidencia que pueda servir a “la construcción de políticas públicas orientadas a poblaciones que en esta coyuntura pueden enfrentar dificultades para continuar estudiando” en las escuelas privadas.
El documento, que fue entregado a funcionarios de la Secretaría de Educación, pone el foco en “la población de niños/as y adolescentes que en situación de vulnerabilidad social asisten a escuelas de gestión privada laica o religiosa, cuya escolarización supone una contribución económica por parte de los hogares”.
El relevamiento de la UCA se suma al informe elaborado por Unicef que se conoció en la jornada de ayer, que revela que 7 de cada 10 niños viven en condiciones de pobreza en la Argentina.
La cifra abarca a cerca de 8,6 millones de menores de 18 años que viven en hogares que no alcanzan el umbral mínimo de ingresos económicos o en entornos donde se ven privados de sus derechos.